En un contundente mensaje, el presidente de la República, Gustavo Petro, hizo frente al fracaso de su polémica reforma laboral en el Congreso y señaló que su hundimiento representa un obstáculo para las ambiciones de su gobierno de implementar transformaciones sociales significativas en Colombia.
Visiblemente molesto por el resultado negativo en la célula legislativa de uno de sus proyectos emblemáticos desde la campaña presidencial, Petro criticó la falta de voluntad de paz y de consolidación de un pacto social por parte del poder económico del país. A través de Twitter, expresó: «El hundimiento de la reforma laboral es muy grave. Demuestra que la voluntad de paz y de pacto social no existe en el poder económico. Dueños del capital y de los medios lograron cooptar el Congreso en contra de la dignidad del pueblo trabajador».
Desde Francia, Petro anunció que su gobierno invitará al Congreso de Colombia a elaborar leyes en favor de la paz y la transformación nacional y democrática. Además, reveló que planea entablar diálogos con banqueros para discutir sobre el mundo financiero y explorar cómo pueden conectarse con las discusiones contemporáneas y la preservación del planeta frente a la crisis climática. También informó que volverá a presentar la reforma laboral y observará de qué lado se posiciona el Congreso de la República, si del lado de la violencia y la exclusión o del lado de liberar al pueblo colombiano de la violencia y la antidemocracia.
En su discurso, el presidente Petro resaltó la importancia de que todos ganen en la sociedad, especialmente aquellos que han sido históricamente perjudicados, como las mujeres en Colombia. Subrayó que la paz implica que las mujeres tengan la oportunidad de prosperar y ser reconocidas, y expresó su agradecimiento por la atención prestada a estos temas.
Además, Petro criticó al Congreso por el fracaso de su reforma laboral, argumentando que no se permitió un debate de ideas sobre el tema. Explicó que la reforma buscaba garantizar el pago de horas extras, días festivos y contratos laborales más estables, especialmente para las mujeres trabajadoras. Hizo hincapié en la necesidad de proteger los derechos de las personas más vulnerables y destacó que una sociedad moderna y equitativa debería velar por el bienestar de todos sus miembros.