Doloroso, lamentable e indignante lo sucedido ayer en la noche con Pancho y con Chita. No entendemos aún la decisión de abatirlos a tiros. En Cali, a un chimpancé lo recapturaron sin acabar con su vida; esto sucedió en diciembre de 2016. Este chimpancé, que medía metro y medio, pesaba 80 kilos y tenía 35 años, forzó unos barrotes y se fugó del Refugio Villa Lorena. Inmediatamente, montaron un operativo con el Dagma, Bomberos, Policía Ambiental y personal del Zoológico. Solo necesitaron dos dardos para sedarlo y trasladarlo VIVO al refugio.  

En Pereira, optaron por asesinarlos a sangre fría, sin darles una oportunidad. Estamos hablando de que el de Cali y los de acá son chimpancés. El pecado de Pancho y Chita fue aprovechar y salir a explorar ese mundo que siempre habían visto tras las rejas de una jaula o de un habitáculo.  

En el video que publicamos, Pancho llegó a los parqueaderos del Parque Consotá. Iba tranquilo e incluso se apoyó en la pared de una cabaña. Los testigos nos dicen que no estaba violento ni agresivo. Sin embargo, a las 12:40 nos enteramos de que a Pancho le dispararon y cuentan que fue acribillado con cuatro disparos de fusil. ¿Por qué? Y a Chita, que estaba en Ukumarí solo con sus cuidadores, también la abatieron a bala. ¿Por qué? ¿Y quién dio la orden a los policías y al ejército? ¿Entonces, qué pintan en Ukumarí si no actuaron como especialistas que son en materia de animales? 

¿Qué se sentirá ser asesinado por quienes Pancho y Chita creían que los debían cuidar? Valoro mucho lo que hacen Sandra como gerente del parque y su equipo, pero con el alma hecha pedazos debo decirles que alguien debe responder por que les fallaron a los animales y a los pereiranos. No me basta lo que salgan a decir la Coronel de la policía o el oficial del ejército. Ellos no son Ukumarí y no están preparados para esa tarea; ellos nada tienen que decirnos. 

¿Cuáles son los protocolos? Si en Cali los dardos dieron resultado, ¿por qué acá no los usaron?  

¿Está realmente preparado Ukumarí para atender la fuga de un animal o cada vez que escapen los abatirán a tiros?  

¿Dónde está el personal que debe estar capacitado para atender este tipo de situaciones?  

¿Cómo escaparon?  

Si los llevan al habitáculo a las seis o antes, ¿a qué hora escaparon entonces?  

¿Es verdad que el único rescatista de Ukumarí renunció hace ocho días? 

Este es un llamado a la reflexión. Acá hubo una cadena enorme de graves errores. Ojalá el abogado Edgar Arana logre establecer qué pasó y que tomen los correctivos necesarios porque estamos adoloridos e indignados.