El impuesto conocido como 4×1000 ha experimentado cambios significativos que beneficiarán a los ciudadanos colombianos, según explicó Luis Carlos Reyes, director de la Dirección de Aduanas e Impuesto Nacionales de Colombia (Dian). El 4×1000 es un gravamen impuesto por el Gobierno Nacional, donde se debe pagar cuatro pesos por cada 1.000 pesos en movimientos financieros, y los bancos son responsables de recaudar este impuesto y transferirlo al Estado.
Una de las principales modificaciones introducidas en la Reforma Tributaria, liderada por el Gobierno de Gustavo Petro, implica un alivio para los bolsillos de los colombianos. Según Reyes, ya no se aplicará el 4×1000 a aquellos que realicen movimientos financieros por debajo de los 14,8 millones de pesos al mes, lo que equivale a menos de 350 Unidades de Valor Tributario (UVT).
Anteriormente, los contribuyentes tenían la opción de una “cuenta marcada” que les permitía realizar transacciones de hasta ese monto sin incurrir en el impuesto, pero si tenían más de una cuenta y no utilizaban la cuenta marcada, aún debían pagar el 4×1000. Sin embargo, con las nuevas medidas, los bancos deberán consolidar información entre sí para que la exención se aplique automáticamente, sin la necesidad de marcar una cuenta específica. Las entidades bancarias tienen hasta el 13 de diciembre de 2024 para realizar los ajustes tecnológicos necesarios y cumplir con esta disposición.
Aunque se mantiene la exención para una única cuenta bancaria beneficiada por el momento, se espera que estos cambios alivien la carga fiscal para aquellos que realizan movimientos financieros de menor cuantía, permitiéndoles ahorrar en el impuesto 4×1000 mientras se promueve la consolidación de la información financiera a nivel bancario.