La JEP, la justicia especial creada por el Acuerdo de Paz, está evaluando si le dará la oportunidad de hablar al exlíder paramilitar Carlos Mario Jiménez Naranjo, alias Macaco. Él fue el jefe del bloque Central Bolívar de las AUC y también del grupo la Cordillera, que se dedicaba al narcotráfico y a la violencia.
Macaco quiere contarle a la JEP información nueva sobre quiénes financiaron el paramilitarismo en Colombia, incluyendo grandes empresas nacionales y extranjeras.
Sin embargo, la JEP tiene dudas sobre si Macaco ha dejado de cometer delitos después del 1 de diciembre de 2016, que es una condición para entrar a esa jurisdicción. Por eso, le pidió a las Fuerzas Militares, la Policía y la Fiscalía que le informen si hay investigaciones en curso contra Macaco por hechos recientes. Según un informe de inteligencia revelado por El Espectador, Macaco estaría involucrado en el crimen organizado otra vez.
La JEP espera tener una respuesta de las autoridades esta semana para decidir si le concede o no a Macaco una audiencia única de aporte a la verdad, como la que tuvo hace poco el también exparamilitar Salvatore Mancuso.