El presidente Gustavo Petro está próximo a anunciar, la salida de dos de sus colaboradores más cercanos: Laura Sarabia, jefe de gabinete, y Armando Benedetti, embajador en Venezuela. La decisión se da luego de que se revelara que la Policía interceptó ilegalmente las comunicaciones de la exniñera del hijo de Sarabia, quien la acusó de robarle un maletín con dinero.
Petro escuchó las versiones de Sarabia y Benedetti en reuniones privadas y consideró que su permanencia en el gobierno afectaba la imagen de su administración. El mandatario había prometido que los cargos diplomáticos se asignarían a funcionarios de carrera y no por afinidad política.
Según la Fiscalía, la Policía hizo pasar a la exniñera y a otra exempleada de Sarabia como integrantes del Clan del Golfo para interceptarlas sin orden judicial. El fiscal general, Francisco Barbosa, dijo que había devuelto las ‘chuzadas’ al país y que investigaría el caso.